Periodoncia en Getafe
¿Qué es la periodoncia?
La periodoncia es la rama de la odontología que se encarga del cuidado de las encías y los tejidos de soporte de los dientes, que son el hueso alveolar, el ligamento periodontal y el cemento radicular.
En la clínica dental Bugella y Rubio contamos con el trabajo de la Dra. Elena Rubio, especialista en periodoncia y cirugía oral. Ella, junto con las higienistas, trabajan en equipo para asesorarte, cuidar la salud de tus encías y, de esta forma, prevenir la aparición de la enfermedad periodontal.
Nuestra clínica dental en Getafe dispone de equipos modernos que nos permiten ofrecerte tratamientos seguros y con excelentes resultados.
¿Qué es la enfermedad periodontal?
La enfermedad periodontal es aquella patología que daña los tejidos periodontales, es decir, los que soportan los dientes. Se compone de dos fases, de las cuales una de ellas no es reversible y, de no tratarse oportunamente, provoca la movilidad de los dientes e, incluso, su caída.
Su aparición se debe a una mala higiene oral, ya que la placa bacteriana es la causa principal de la inflamación e infección de los tejidos.
Cuando la placa no se remueve adecuadamente, se liberan toxinas que inflaman los tejidos periodontales. Se empiezan a crear unos espacios profundos entre la encía y el diente, denominados bolsas periodontales, las cuales albergan gran cantidad de sarro y bacterias que, progresivamente, infectan los tejidos, afectando la firmeza de los dientes dentro del hueso, conllevando a su movilidad y posterior pérdida.
El diagnóstico de la enfermedad periodontal se hace con un examen clínico denominado periodontograma, en el cual se registran unas medidas específicas que se hacen en todos los dientes utilizando una sonda periodontal. Esto con el fin de conocer parámetros como la profundidad al sondaje y la presencia de sangrado y, de esta forma, establecer la gravedad de la enfermedad.
La profundidad del sondaje es lo que indica la presencia de bolsas periodontales, una característica propia de la periodontitis.
La enfermedad periodontal es una patología crónica que no tiene cura en sus estados más avanzados.
El tratamiento lo que busca es controlar la inflamación y detener el progreso. De ahí la importancia de acudir al dentista con frecuencia y mantener una buena higiene oral.
Fases de la enfermedad periodontal
1. Gingivitis
Consiste en la inflamación de la encía, sin afectar los demás tejidos de soporte. Es la fase reversible de la enfermedad y la antesala a la periodontitis, razón por la cual debe ser tratada y diagnosticada a tiempo.
Es una afección muy frecuente, tanto que se puede afirmar que todas las personas en varios momentos de su vida han padecido de este problema.
Se caracteriza por sangrado espontáneo o al cepillarse, acompañado a veces de dolor.
La gingivitis siempre está asociada con la presencia de placa bacteriana, por eso, en la clínica dental Bugella y Rubio le hacemos a todos nuestros pacientes enseñanza en higiene oral, para que desde casa puedas prevenir la aparición de esta patología.
2. Periodontitis
Es un proceso inflamatorio más grave que afecta el resto de los tejidos de soporte. Es la fase irreversible de la enfermedad, siempre precedida por una gingivitis.
Se caracteriza por la presencia de sarro y de bolsas periodontales, que son focos infecciosos que van destruyendo progresivamente el hueso que sostiene los dientes, provocando su movilidad y pérdida.
Signos y síntomas de la enfermedad periodontal
- Encías gruesas y rojas
- Sangrado de las encías
- Presencia de sarro
- Mal aliento
- Sensibilidad con cambios de temperatura
- Encías retraídas (dientes más largos)
- Movilidad dental
- Pérdida de dientes
Factores de riesgo de la enfermedad periodontal
Como ya lo mencionamos, la causa principal de la enfermedad periodontal es la placa bacteriana. Sin embargo, existen unos factores de riesgo que aumentan la susceptibilidad para su aparición. Entre ellos se encuentran:
Por predisposición genética, una persona puede ser más propensa al desarrollo de gingivitis y periodontitis.
Fumar afecta la irrigación y la cicatrización de los tejidos orales, además de interferir en la adecuada oxigenación, provocando que las encías se tornen de un color morado
Los cambios hormonales que padecen las mujeres las hacen más propensas a padecer inflamación de los tejidos periodontales. En el embarazo, por ejemplo, es común la aparición de gingivitis del embarazo, debido al aumento de la respuesta inflamatoria de los tejidos, acompañada de la presencia de placa.
El déficit de nutrientes y vitaminas puede afectar el estado de los tejidos orales y su respuesta de defensa ante cualquier cambio que se produzca.
Tratamiento periodontal
El tratamiento periodontal consta de diferentes técnicas, que varían según la gravedad de la enfermedad. Su finalidad es controlar la infección y detener el avance de la misma.
En casos graves, además de necesitar un tratamiento periodontal básico, también se hace necesaria alguna cirugía para remodelar o regenerar el tejido perdido, con el fin de mejorar el pronóstico del tratamiento, buscando que los dientes permanezcan en boca el mayor tiempo posible.
Tratamiento para la gingivitis: En estos casos, basta con realizar limpiezas dentales y enseñanza en técnicas de higiene oral. El objetivo es revertir la inflamación mediante el control de los niveles de placa.
Tratamiento para la periodontitis: Según la gravedad (leve, moderada o severa), se indican curetajes, raspados radiculares y cirugías periodontales. La finalidad es detener la progresión de la enfermedad y controlar la infección.
Ventajas del tratamiento periodontal
- Controla de la infección
- Elimina las bacterias patógenas
- Detiene el progreso de la enfermedad
- Puede evitar la pérdida de dientes
- Combate el sarro y el mal aliento
Fase de mantenimiento periodontal
Una vez controlada la enfermedad, el paciente entra en fase de mantenimiento periodontal, que consiste en citas regulares con el fin de retirar el sarro que se va formando, evitando que se inflamen los tejidos y la enfermedad se re active.
El mantenimiento periodontal es algo más profundo y específico que una limpieza convencional. La frecuencia con la que se necesita varía de unos pacientes a otros.