Si queremos mantener unos dientes bonitos y sanos lo más importante es tener una buena higiene dental y cepillarse correctamente los dientes.
Siguiendo estas indicaciones conseguiremos una limpieza bucal correcta, ayudando a mantener nuestra salud bucodental:
- Cepillarse los dientes un mínimo de dos veces al día. Lo mejor sería cepillarse los dientes tres veces al día o después de las comidas principales. El cepillado que hacemos antes de ir a dormir es el más importante ya que por la noche baja el pH la boca y producimos menos saliva por lo que se incrementa la probabilidad de tener caries.
- El cepillado debe durar mínimo 3 minutos. Es lo mínimo que debemos invertir en nuestro cepillado si queremos que sea efectivo, poniendo especial interés en el cepillado de antes de irnos a dormir. Por ello en la clínica solemos dar un consejo: que el cepillado de la noche dure 4min, dividiendo la boca en 4 áreas, así nos aseguramos de utilizar 1 min por cada una de ellas.
- No cepillarnos los dientes justo después de comer. Cuando terminamos de comer el pH de la boca desciende y se vuelve más ácido, si nos cepillamos los dientes nada más comer frotaremos el ácido por los dientes dañando el esmalte. Por lo tanto, debemos esperar unos 30 minutos para poder cepillarnos
- Cepilla correctamente tus dientes. Para que el cepillado sea correcto debemos colocar el cepillo en un ángulo de 45 grados, cepillaremos realizando movimientos circulares sin presionar demasiado para no dañar lo tejidos. Debemos cepillarnos todos los dientes por dentro y por fuera, no debemos dejar ninguna superficie sin cepillar.
- Cepíllate la lengua. Debemos cepillarnos la superficie de la lengua de atrás hacia adelante, ya que en ella se acumulan gran cantidad de bacterias.
- Higiene interdental.: Debemos utilizar el hilo dental, una vez al día, ya que con el cepillado no es posible eliminar la placa bacteriana que tenemos entre los dientes. Para usarlo tenemos que cortar un trozo de entre 30 o 40 cm, y deslizarlo entre los dientes haciendo movimientos suaves arriba y abajo. En los pacientes que han perdido algo de encía es aconsejable incorporar cepillos interdentales, ya que en estas ocasiones el hilo dental es insuficiente.
- Utilizar un cepillo dental suave. Cuando tengamos que elegir nuestro cepillo de dientes debemos decantarnos por uno con una dureza de cerdas blandas o de dureza media, ya que los cepillos de cerda dura pueden lesionar más fácilmente el esmalte y la encia.
- Renueva tu cepillo cada tres meses. Debemos cambiar nuestro cepillo de dientes cada tres o cuatro meses, o antes si vemos que las cerdas están dañadas. Cuando un cepillo de dientes no está en correcto estado nuestro cepillado ya no va a ser tan eficaz.
- Limpia tu cepillo de dientes. El cepillo de dientes debe limpiarse bien después de cepillarnos, eliminando la pasta y restos de comida que puedan quedar en él. Para guardarlo no debe estar en contacto con los demás cepillos y lo recomendable es que lo hagamos de manera vertical.
- Elegir la pasta de dientes correcta. Aunque si realizamos un correcto cepillado la pasta que elijamos no es tan relevante, hay pastas que son específicas para ciertos problemas dentales. Si no tenemos ningún problema en concreto lo normal es que usemos pastas ricas en flúor para que nos ayuden a prevenir las caries. Lo mejor es que tu dentista te aconseja una en función de tus necesidades.
Aun así, si no sabes si estas cepillándote correctamente los dientes pásate por nuestra clínica y despejaremos todas tus dudas sobre tu higiene dental. En la Clínica Bugella&Rubio tenemos un gran equipo dispuesto a enseñarte como mantener y mejorar tu salud bucodental.